Moodboard: Qué es y cómo aplicarlo a tu estrategia de contenidos

Elaborar un Moodboard es una técnica cada vez más utilizada por las personas y las empresas a la hora de conseguir inspiración en un proyecto, ya sea la decoración de una estancia, o el desarrollo de una estrategia de marketing de contenidos.

Y es que, precisamente, un Moodboard se trata de un collage fotográfico para visualizar ideas y obtener inspiración. Esta tipo de creación es cada vez más habitual en marketing, puesto que supone una forma de ordenar ideas y estructurar una estrategia para no perder el foco.

De esta manera, en un tablero de inspiración se plasma una idea general compuesta de muchos otros elementos, y se planifican los plazos de ejecución de cada tarea de manera que se facilite la materialización de todo el plan. Sin duda, resulta un recurso potente en cualquier estrategia de marketing digital.

Con esta técnica se puede bocetear de forma muy original, por ejemplo, una idea sobre un producto o servicio. Los diseñadores pueden usar esta técnica también para ofrecer presentaciones y explicar los beneficios, funcionabilidades y características de un nuevo elemento. Pero también es extremadamente útil para elaborar un plan de contenidos impactante y efectivo.

 El Moodboard dentro del marketing digital de la actualidad

Conocer el significado exacto de la palabra Moodboard puede dar a entender muchas cosas relacionadas al mundo del diseño y que se aplican a otras áreas de la empresa como el marketing. Y es que esta técnica tiene la particularidad de nacer del mundo de diseño gráfico.

Al tratarse de una herramienta netamente visual resulta de gran ayuda para organizar planes complejos, simplificándolos y otorgando una visión holística de todo el proyecto. Hay que tener en cuenta que los planes de marketing digital tienen una mayor parte intangible. Es decir, no se pueden visualizar antes de ser materializados por completo.

Y es aquí donde adquiere relevancia esta estrategia de elaboración de un muro visual para tu plan de marketing. En el caso de un plan de contenidos, estos con toda probabilidad conllevarán formatos visuales, ya sean imágenes o vídeos, y el Moodboard puede ser una fórmula perfecta para trazar correctamente el camino hacia la consecución de los objetivos marcados.

No obstante, su uso puede ocasionar cambios inesperados en la idea de un producto o servicio para una empresa por la variedad de interpretaciones que puede tener. Esto puede ocurrir porque al tener la posibilidad de adelantarse a una vista previa del resultado final, también hace posible detectar posibles incongruencias en la estrategia o detalles que se deben adaptar.

Beneficios de contar con un Moodboard en la estrategia de contenidos de marca

Entre algunas de las ventajas que se pueden conseguir con la elaboración de un plan de contenidos a través de un Moodboard están las siguientes:

• Se pueden aclarar todas las ideas sobre un determinado proyecto de una forma visual y práctica.
• Es un borrador de lo que será el proyecto final de la empresa.
• Consta de múltiples partes que sirven para entender una idea principal.
• Sirve para descubrir nuevas formas de alcanzar un objetivo para la marca.
• Es una manera de juntar varias ideas sobre un mismo proyecto y en un solo lugar.
• Permite ver los elementos que pueden seguir siendo utilizados en una estrategia de marketing y cuáles se pueden descartar.
• Sirve como una conexión de varias ideas sobre un mismo elemento para saber si se complementan o no.
• Ayuda a explicar a los clientes las diferencias de contenidos en las nuevas propuestas.
• Reduce las incoherencias en cuanto a la estética y la comunicación, ya que se trabaja en un momento temprano del proyecto y no en su finalización.
• Permite tomar decisiones clave sobre la imagen y otros elementos en una etapa temprana del mismo.

Cómo poner en práctica una técnica como la de Moodboard

Para poner en funcionamiento una estrategia creando un tablero de inspiración, ya sea físico o digital, es necesario seguir algunos pasos clave que van a llevar a buen puerto un proyecto determinado:

1.- Tener un objetivo claro y conciso

Todo tipo de proyectos comienzan con una idea principal y unos objetivos claros que conseguir. Estos deben ser lo más transparente posible en todos los niveles en los que se trabaje, ya sea para una marca o persona. Reunir toda la información que se tiene a la hora de poner en práctica esta técnica es clave.

Una recomendación es determinar qué palabras clave serán las que delimiten el proyecto. Incluso, se pueden utilizar palabras en otros idiomas según lo requiera el tipo de objetivo al cual se quiere llegar, ya sea a nivel local o internacional.

2.- Tener una idea clara o una inspiración

Una vez que se tengan claros los objetivos es hora de buscar las ideas que van a contar una historia o van a reflejar el alma del proyecto final. Lo importante es no descartar ningún tipo de información e ir sumando de a poco todos los elementos que vayan surgiendo con el pasar del tiempo.

Hacer una reunión de braimstorming puede ser una buena idea para lograr recopilar datos necesarios para la creación de este Moodboard. Hay que tener en cuenta que esta técnica puede estar compuesta no solo de imágenes sino también pueden ser vídeos o textos.

3.- Determinar el diseño del mismo

En este punto es necesario poder elegir entre otras cosas los colores que se van a utilizar en el proyecto final y el diseño. También se debe escoger el tono y el tipo de mensaje que se va a transmitir. Lograr hacer una composición completa, bien definida y que tenga coherencia es lo más importante.

Tener siempre presente cuál va a ser el objetivo que se quiere conseguir es necesario para elegir los mejores elementos que van a formar parte del proyecto. Entre ellos están los colores, las formas, los diseños, etc. Pensar en la mejor manera de integrar todos los elementos es necesario y con esta técnica resultará más sencillo.

4.- Tomar la acción

Luego de que se tenga toda la información es necesario escoger cuál va a ser la que va a representar de mejor forma la idea central del proyecto. Después se puede rodear esa idea con otras menos importantes o secundarias y así darle un valor agregado a la propuesta.

En este paso se debe depurar y dejar atrás todas las ideas que no van a ser utilizadas o que producen un choque propuestas muy fuerte. Además, es el momento de empezar a pensar en plazos pero, sobre todo, definir aspectos de la comunicación externa, como las categorías de contenidos, el calendario, los mensajes y los canales en los que se difundirán.

Aplica un Moodboard a tu estrategia de contenidos y  construye un discurso coherente

El utilizar una técnica de este tipo a nivel de marketing digital puede abrir muchas puertas para los distintos equipos de las empresas encargados en idear propuestas creativas. Y es que con su utilización se puede crear desde cero un proyecto, lanzamiento de producto o servicio y una campaña.

Con el simple hecho de poder reunir en un mismo lugar varias ideas ya se está facilitando con una de las premisas básicas en la creación de contenido empresarial que es elegir las temáticas y los formatos más adecuados. Para las marcas es determinante contar con este tipo de técnicas, ya que les permite implementar estrategias efectivas de forma mucho más sencilla.

Una empresa que aplique el Moodboard al desarrollo de sus planes tiene el camino allanado para conseguir el éxito en el corto o mediano plazo. Sin importar cuál es el objetivo final de una marca, esta técnica permite agrupar todas las ideas que han surgido y escoger cuáles serán las más idóneas para impactar al público.

En otras palabras, para las marcas es un borrador que va a ayudar a llegar al objetivo final de forma organizada y coherente.

El brandboard y su relación con el Moodboard

Una vez que se tiene ya definido todo lo relacionado con la idea y las informaciones iniciales es hora de crear lo que se denomina como Brandboard. Este no es sino una guía del estilo visual de la marca y en él se van a ver reflejados los elementos de toda la identidad estética de una empresa.

Es muy importante, ya que el brandboard nace a partir del Moodboard. Entre ellos están el logo, la tipografía, los colores, el tipo de mensaje, etc. Se trata de la identidad que tendrá una marca de cara al público. En otras palabras, es el diseño final de una marca y uno de los pasos más importantes en la creación del branding de una empresa.

También el manual de marca está identificado en este punto. Este habla de cómo se deben utilizar los elementos gráficos y cómo no se deben usar. Se trata de una guía para que otros diseñadores y encargados del marketing y de la comunicación puedan trabajar.

Para poder sacar el máximo provecho a tu estrategia de contenidos con esta técnica tan creativa puedes contar con Coobis. Y es que ponemos a tu disposición la Plataforma de Branded Content & Influencer Marketing con la que puede obtener la mayor visibilidad y alcance para tu marca.